Críticos artísticos lo definen como un gran artista, destacando en el mundo cofrade. Sus obras, según varios expertos, hablan de sus tallas defendiendo su gran estudio y representación de la anatomía, sobresaliendo en sus imágenes cristíferas, con un rostro serio, semblante, y siempre intentando que posean la "dignidad de Dios". Ahora, sus imágenes marianas, la gran mayoría dolorosas, muestran un gran dolor, como ya bien lo indica la propia palabra "dolorosas", aunque algunas no tanto, más bien atemperadas, destacando en todos por esos puntos personales que le da el sevillano. Entrando en sus características a la hora de tallar, son sus ojos pintados sobre madera,(excepto María Santísima de la Soledad, que son de cristal), sus "hoyitos" en la barbilla, la boca entreabierta con la visión bastante nula, pero visible, de la lengua; su policromía es pálida, pero con mejillas sonrosadas; y anatómicamente, realiza el hueco de la supraclavicular, el arranque o principio de los trapecios y los esternocleidomastoideos. Esto, y sus demás dotes artísticas, lo hacen en uno de los artistas más polivalente y efectivos, del siglo XX.
Entre sus obras, destacan:
Nuestro Padre Jesús Resucitado de Motril, 1993.
Nuestra Señora de la Paz de Motril, de 2004.
Nuestra Señora de la Consolación de Granada, 1990.
Nuestra Señora de la Estrella de Granada, 1980.
Nuestro Padre Jesús de la Pasión de Granada, 1985.
Nuestra Señora de la Encarnación de Granada, 1982.
Nuestro Padre Jesús Cautivo de Granada, 1983.
Nuestra Señora de la Consolación de Sevilla, 1969.
Y podríamos decir muchas más obras, pero estás son de las más importantes para la provincia granadina, para la ciudad motrileña y las más personales para él, que es la última, la Virgen de la Consolación, titular mariana de la hermandad de la Sed del barrio de Nervión, pues fue su primera dolorosa, después de la restauración a la Virgen de los Dolores de la hermandad de "Los Servitas", ambos de Sevilla.
Aliento Nazareno.
Aliento Nazareno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario